Cuando reaccioné, el cigarro se había consumido, al igual que mi maldita vida.

Cuando reaccioné, era demasiado tarde, mi miserable vida se consumió junto con la de un cigarro... o ¿primero fue la del cigarro y después la mía? o ¿la mía y después la del cigarro?.
Recuerdo que fue mientras trataba de arreglar problemas dentro de mí, mientras divagaba. Sentada en una incómoda y fría ventana. Tan sólo tenía 13 años. Nadie se percató en ese instante, ni siquiera yo. Fue algo increíblemente veloz. ¡Mejor!, no me dio tiempo ni de gritar. Lástima que ya no se puede prender otro cigarro, no tan fácilmente. Podrá prenderse, mas no es el mismo que se consumió anteriormente. Nada es igual.
Cada cigarro, es único, cuenta una historia distinta pero similar; es una nueva vida; es una nueva mentira. La cual ya no puedo vivir, pues simplemente no existo, nunca existí, pero ya no duele. Pues el dolor es subjetivo y el sufrimiento opcional. Y yo decidí ya no sufrir.

~Lopherfrey Nojsyt.